Mejora tu salud con las duchas de hidroterapia

Utiliza el método terapéutico y curativo para relajarte después de un día de trabajo con numerosos beneficios sobre tu organismo y mejora tu salud con las duchas de hidroterapia.

 ¿Qué son las duchas de hidroterapia?

Actualmente este proceso se fundamenta en la acción térmica que tiene el agua directamente sobre tu cuerpo. Cuando elijes estas duchas disfrutas de un método perfecto para aportar vitalidad, es una de las mejores formas para efectuar hidroterapia, cuando cae en forma constante el agua mientras te duchas.

Renuevas todas las sensaciones y estímulos necesarios para tu buena salud corporal.

Sigue las pautas de la hidroterapia utilizando cualquiera de sus métodos: agua caliente, frío, vapor o hielo, conseguirás promover tu mejor estado físico.

Las propiedades y poderes curativos del agua son inigualables y reconocidos durante todas las generaciones, principalmente como elemento clave en medicina natural, calmando el espíritu y cualquier dolencia del cuerpo.

Numerosas investigaciones y estudios comprueben los efectos benéficos de la hidroterapia, además de comprobar el poder del agua ante distintas molestias y dolores. En el caso de la fisioterapia acuática los excelentes resultados obtenidos, mejoran la fuerza muscular y problemas de articulaciones.

Este método funciona aliviando orgánicamente todo tipo de afección y al ser natural trabaja en dos aspectos importantes:

  • Terapias de calor: mediante el uso de agua caliente en las duchas de hidroterapia, se dilatan los vasos sanguíneos mejorando la circulación y generando un mayor flujo de endorfinas y enzimas ayudando así en el alivio del dolor. Eliminas las sustancias toxicas de tu organismo, evitando también las tensiones directas sobre el corazón al aumentar tu ritmo cardíaco y bajar la presión arterial.
  • Efecto de la ingravidez: otro aspecto clave es la flotabilidad del agua que logra en un 90% disminuir tu peso corporal, eliminando presiones en músculos y articulaciones con este método ideal en casos de artritis.

 Beneficios de la hidroterapia

Los efectos de este tratamiento físico residen en la acción del agua sobre tu cuerpo y la temperatura, además de la renovación que activa estímulos y sensaciones.

En nuestros días la moderna tecnología favorece tu relajación, mejora las técnicas de hidroterapia con los componentes y materiales que representan una verdadera revolución, aumentando los siguientes beneficios que produce:

  • Mayor sensibilidad ante las reacciones nerviosas dependiendo de la temperatura del agua, si es caliente provoca efectos sedantes y fría aumenta el tono muscular y la sensibilidad periférica de los vasos superficiales.
  • Genera reacciones de tipo circulatoria con agua fría reduce los latidos del corazón al bajar la presión arterial y aumentando la temperatura acelera los latidos.
  • Relaja toda tu musculatura.
  • Disminuye los dolores articulares.
  • Reduce considerablemente el estrés.
  • Proporciona mayor distensión nerviosa.
  • Provoca menos espasmos musculares.
  • Calma dolores corporales.
  • Mejora la flotabilidad ante la gravedad.
  • Aumenta la resistencia y fuerza.
  • Favorece la estabilidad y equilibrio.
  • Beneficia procesos inflamatorios por la presión hidrostática.
  • Potencia la confianza personal facilitando la movilidad.
  • Promueve la salud en distintas áreas y alivia la ansiedad.
  • Mejora estados de insomnio, según informes de la Fundación Nacional del Sueño, aconsejando duchas calientes antes del descanso nocturno y la hidroterapia para un sueño profundo.
  • Alivia cefaleas y tensiones de hombros, cuello o lumbares.

Descubre este tipo de tratamientos recomendado en dolores del sistema esquelético y muscular con masajes de agua caliente, especialmente en casos de lesiones deportivas. En relación con el sistema respiratorio, se asocia la hidroterapia a las ventajas de aplicar calor húmedo ante enfermedades respiratorias. Los resultados también son asombrosos en el sistema inmunológico y  digestivo.

Así, la hidroterapia está indicada en los siguientes casos:

  • Dolores de espalda.
  • Afecciones relacionadas con la coordinación.
  • Lesiones deportivas.
  • Espondilitis Anquilosante.
  • Fibromialgia, artritis y otras enfermedades similares.
  • Parkinson
  • Accidentes cerebrovasculares.

Tipos de duchas de hidroterapia

Si decides tomar un baño con las características mencionadas, recordad que existen diferentes utilidades, tipos y prestaciones para estos masajes terapéuticos.

Normalmente, será aconsejable no exceder las sesiones entre 7 a 15 minutos, según el tipo de duchas:

  1. Filiforme: la presión del agua en esta técnica es mayor que otras duchas de lluvia, desagradable para algunas personas.
  2. Babosa: en este tipo la presión es nula y el agua cae uniforme sobre la parte del cuerpo que se trata.
  1. Escocesa de contraste: en este tipo de ducha de hidroterapia las temperaturas caen lentamente, desde los 40º C hasta 20º C, aplicándose a una distancia de 3 a 4 metros.
  1. Ducha de lluvia: el agua polifragmentada es característica de estas terapias para ayudar a la relajación, comenzado la aplicación desde los pies hasta subir a los hombros y en forma inversa.
  1. Envolturas: usadas en pacientes con diferentes tipos de envolturas en tejidos de lana o lino y pueden ser más o menos frías, húmedas y secas.
  1. Chorros: el agua sale por un orificio único con distintas temperaturas y presión, diferentes clases de chorros subacuáticos y otros con o sin presión.